Mi rincón creativo.

Bienvenido a mi blog llamado: "Mi libro en blanco".
Me presento, mi nombre es Verónica Orozco García, aunque también me puedes conocer bajo el seudónimo Orgav. Soy amante de todo lo creativo: fotografías, ilustraciones, manualidades... Así como la escritura. Me apasiona moldear las palabras junto con los sentimientos para crear historias, eso sí, para todo tipo de lectores, pues me considero una escritura versátil.. Digamos que soy de ese tipo de personas que sueñan despiertas.
Aquí, en mi rincón, podrás encontrar una muestra de todo ello, espero lo disfrutes. Saludos.

Nota para el lector-visitante: el contenido de éste blog está sujeto a derechos de autor, el material se encuentra registrado en el Registro de la propiedad intelectual de Sevilla. Cualquier uso indebido del contenido, sin permiso del autor, se considera delito.

sábado, 22 de octubre de 2022

Sin ti

Ya no me haces falta. 
Ya no me haces falta porque descubrí que era más sano para nosotros. 
No me haces falta porque descubrí que hacíamos falta a otros. 
No me haces falta porque somos mejor cuando somos para quien nos necesita. 
Y no me haces falta porque realmente yo no te servía en tu vida. 
Ya no me haces falta porque la vida nos enseñó que tenía que ser así, 
y no me haces falta porque nunca nos hicimos usó. 
Ya no me haces falta porque eres diferente , y yo no te hago falta porque también lo soy. 
No me haces falta porque  ya aprendí todo lo que tenías para mí. 
Y yo no te hago falta porque tenías que poner en práctica todo lo que te enseñé. 
Ya no te hago falta porque aprendiste a ser feliz sin mí. 
Y no me haces falta porque descubrí que se puede ser feliz sin ti. 
Ya no me hace falta más que saber que todo mereció la alegría de vivir sin necesitarnos. 

A todas y cada una de esas almas que se cruzan en nuestro camino.
 ©Orgav.
Todos los derechos reservados. 

martes, 2 de noviembre de 2021

Cómo quiero que me recuerden

Cómo quiero que me recuerden. 

Pocas veces somos conscientes que estamos aquí de paso, que un solo instante es suficiente para que "la partida"  termine. Y que cuando el momento llegue solo seremos recordado por lo que hemos sido para con los demás, por todo aquello que les hemos hecho sentir, porque nuestro mayor legado son y serán los sentimientos. Nuestra cara será un recuerdo difuso que se aclarará con una fotografía, pero los sentimientos jamás se emborronan. Nunca seremos recordados por lo que jamás hicimos. 
Muchas veces nos dejamos llevar por sentimientos y pensamientos erróneos, nos dejamos llevar por el ego, la rabia, la ira, por creencias sin fundamentos... Y cometemos injusticias y errores, hacemos valores y juicios hacia los demás que no son reales y alimentamos esa parte negativa de nosotros, sí, porque todos tenemos un lobo bueno y un lobo malo y al que más alimentamos es al que hacemos fuerte, al que hacemos crecer y en base a él, así seremos recordados. 
Muchos piensan que ya es tarde, que no se puede cambiar, pero eso no es así, solo es tarde cuando la partida ha terminado, mientras haya vida, hay partida y podemos enmendar nuestro juego. Debemos mirar dentro de nosotros, buscar ese lienzo en blanco que está ahí y, desde él, comenzar a crear quién queremos ser, pensar CÓMO QUIERES SER RECORDADO y empezar a actuar desde ahí, porque la acciones buenas, los buenos sentimientos tienen la magia de hacer borrar aquello que no hace bien al ser. 
Sé que no todo el mundo entenderá el porqué de estas palabras, que pensarán que no es tan sencillo y que todo cuenta...  Ok. Lo entiendo, lo respeto, pero sólo con que a alguien le sirva de algo, le ayude a mejorar, a mí me vale, porque poco a poco, también suma. 

Y ahora yo te pregunto: 
¿Cómo quieres ser recordado? Actúa. 

P. D: Yo, cómo mi mejor versión.

©Orgav. Verónica Orozco García
Todos los derechos reservados sobre el texto. 
Imagen cogida de galería de Internet. 

sábado, 6 de junio de 2020

Amor de Mickey Mouse

Práctica técnica grafito, carboncillo y color pastel. 
Título: Con su Mickey Mouse 🥰
©Ilustraciones Orgav

sábado, 16 de mayo de 2020

Retrato niña

Título: Retratando niña. 
Técnica: Grafito (A3) 
©Ilustraciones Orgav. 

Tiranosaurio Rex

Título: Tiranosaurio Rex. 
Técnica: Grafito. 
Tamaño: A3
©Ilustraciones Orgav

Proceso:
©Ilustraciones Orgav

Mandalorian

Título: Mandalorian. 
Técnica: Grafito. 
Tamaño: A3. 
©Ilustraciones Orgav
Proceso:

sábado, 25 de abril de 2020

Mandala flor de loto con Om

Mandala de flor de loto blanca por el símbolo Om en su interior. 
Imagen muy representada en salas de yoga y meditación. 
Técnica: roaring. 
©Ilustraciones Orgav. 

Flor de loto blanca

Flor de loto blanca "El renacer del ser espiritual" "Del lodo a la luz"
Técnica: grafito
©Ilustraciones Orgav

Ganesha

Representación del Dios Ganesha en grafito. (Fase espiritual) 
©Ilustraciones Orgav

miércoles, 25 de septiembre de 2019

Entrevista por mi compañera de letras Manoli Vicente Fernández



"La escritura es la pintura de la voz"
Voltaire.

Buenas noches.
Les comparto una pequeña entrevista realizada por mi compañera de letras Manoli Vicente Fernández para nuestro blog de escritoras  Nosotras escribimos.
Espero que les guste y me conozcan un poco más.
Gracias.

"La escritura es la pintura de la voz"
Voltaire.

 Ejercicio: ¿Y tú por qué escribes?

¿Cuándo sentiste la necesidad de escribir?¿Desde niña o por determinado resorte que activó tu proceso de adulta?

Empecé a escribir sobre los 11 años. Me regalaron un diario y, aunque no tenía muy claro que escribir, aquel fue el empuje. 
Aunque desde pequeña, cuando fui capaz de dominar la lectura y comprender lo que leía, me encantaban los libros y todos los mundos que encerraban.

¿Qué significa para ti la escritura y qué contiene de personal o liberador?

Para mí, el significado de la escritura ha tenido un proceso evolutivo. He pasado de soñar con ser una escritora reconocida, a sentir que lo que escribo es algo más personal, algo con sentido para mí y que no necesariamente todo el mundo tiene que leer pero que no me importa que algunas personas lo lean. 

¿Crees que escribir es un ejercicio que ayuda a conocerse mejor y profundizar en el ser humano?

Creo que en la vida nos paramos muy poco a conocernos a nosotros mismos, asumimos que nuestras reacciones son como son  por nuestra forma de ser pero no es del todo cierto, influyen otros factores externos. 
Escribir nos ayuda a conocernos un poco más pero eso no quiere decir que todo lo que escribimos refleje lo que somos. A modo personal, me gusta mucho escribir desde diferentes roles que nada tienen que ver con mi persona, es un buen modo de saber hasta dónde puedes llegar.

¿Dirías que hay o buscas dar un determinado mensaje en tu obra?

La verdad es que casi siempre busco dejar algún mensaje, alguna moraleja, alguna enseñanza, etc. Creo que tiene sentido.

¿Crees que escribir es más bien una forma de ser y ver la vida o es algo extraordinario que no sabes de dónde surge?

Creo que escribir es el mejor de los regalos que nos ha podido ofrecer la vida y que no es algo extraordinario destinado solo a unos pocos,  a los mejores.
Pienso que realmente toda persona tiene la capacidad de escribir, toda persona con formación y con continuidad puede escribir. Unos lo harán mejor, otros lo haremos peor, pero quien se lo proponga puede escribir.

¿Qué significa el éxito y el ego para ti al escribir? ¿Buscas trascender con tu obra?

Cuando empecé a escribir solo pensaba  en llegar a escribir algo que me subiera a lo alto, que me coronara como una escritora reconocida y famosa.  
Pero me ocurrió una vez que, participando en un blog de escritura, recibí de parte de un lector,  la interpretacion de uno de mis  relatos  y tras ello comenzó a juzgarme, de un modo erróneo, como persona por lo escrito. Esta anécdota me dio mucho que pensar, comprendí que aquello era a lo que me exponía y que tenía que tener cuidado con lo que deseaba.  Llegué a la conclusión de que no necesitaba el éxito en mi vida porque no estaba dispuesta a ser juzgada por lo que escribiese.
Considero que las personas que escribimos no somos lo que escribimos sino cómo lo escribimos.

Por otra parte, pienso que el ego es algo que no debemos alimentar, pero es verdad que a nadie le amarga un dulce.
Mi mayor alegría me la dio una conocida, que hoy en día es una muy buena amiga, al descubir mi blog. Me dijo que llevaba  años sin leer nada y que mi blog le había vuelto a enganchar a la lectura. ¿Hay mejor éxito que ese?  Si tengo que trascender quiero que sea así, sin mayor publicidad.

Orgav.
(Verónica Orozco García)
Si quieres conocer mi blog: Mi libro en blanco
 Todos los derechos reservados.

 ¿

viernes, 17 de agosto de 2018

¿Qué es añorar?

Vas sintiendo, poco a poco, cómo  la alegría  se apaga, la sonrisa se borra de la cara, el estomago se cierra de ese modo que tanto duele,  el corazón  susurra su nombre y la memoria proyecta un instante de cómo sería ese momento si  estuviera aquí. 
Añorar es sentir cómo mueres, poco a poco, de tristeza aun estando vivo y siendo consciente de que nada podrá ocupar ese vacío con el que tendrás que vivir, siempre.

©Orgav

viernes, 25 de mayo de 2018

El tiempo no miente

UN TEMA, VARIAS HISTORIAS: EL SECRETO.

TÍTULO: El tiempo no miente.

El tiempo se cruzó en mi camino, llevaba los  brazos entrelazados a la espalda y un paso marcado.
-¡Secretos!- dijo parándose frente a mi cara, para luego desaparecer.
De pronto, me vi rodeada de máscaras tiradas por el suelo frente a un grupo de personas desconocidas con las que había compartido toda una vida.

©Orgav
Todos los derechos reservados sobre el texto.
Imagen usada de Internet perteneciente a: The Closet Club.

miércoles, 23 de mayo de 2018

Viajando con el presente

Un tema, varias historias. Tema 1: Trenes.

Viajando con el presente.

No siempre fue así. Hubo un tiempo en el que, ni montar en triciclo como los niños grandes, ni  ponerse los zapatos de papá o sus camisas,  le ayudaba a ser feliz. Tal era su frustración que creció con la necesidad de  alcanzar edades mayores, como si la felicidad fuese una cuestión  de edad.
Con el pasado del tiempo,  se dio cuenta que ya había que alcanzado, varias veces, aquellas edades añoradas y que, aun así, seguía sin ser feliz. Sentía que su vida había  ido a  varar  en un vagón que no iba a ninguna parte, y sintió  morir.
A pesar de estar aturdido por los acontecimientos, supo reflexionar:  comprendió que la felicidad no estaba en su futuro y que, por culpa de su obsesión, tampoco formaba parte de su pasado. Comprendió que había  pagado un billete  muy caro al no disfrutar ni del viaje ni del paisaje  y decidió que,  desde ese mismo instante, comenzaría a vivir en un continuo presente, anexo entre un pasado que ya fue y todo lo que estaba por venir, mientras viajaba  en el tren de su vida sin un destino fijo, sin edades...

©Orgav

Todos los derechos reservados sobre el texto.
Imagen usada de Internet.

Letargo

Un tema, varias historias. Tema 1: Trenes.

Letargo.

Seca. Seca de ideas, de palabras.
La inspiración  no me visita y  me aturde su ausencia. La siento a mi alrededor pero
no la encuentro y ya no nacen historias...

Él está allí, en la lejanía de un papel en blanco, montado en el tren de la inspiración, esperando un destino incierto.
Solo es un personaje más, sin materia alguna.

Me mira y exalta con sus manos la distancia que nos separa, me hace entender que se siente encerrado en aquel tren sin rumbo.
Siente miedo a morir asfixiado entre un cúmulo de  ideas interrupidas, inacabadas,  que apestan, que le aplastan...
Me mira y lanza súplicas, mientras golpea con fuerza un cristal imaginario que solo existe  entre las pocas partículas de realidad que hay entre su mundo y el mío.
Agotado, llora de rabia mientras musita su indignación. La impotencia le pesa y se deja caer entre los asientos del vagón.
Allí  está, tirado en un suelo que no existe, cada vez más lejos de tener una vida, de  tener un camino que seguir, de darle sentido a la levedad de su existencia...

-No puedo hacer nada por ti -le digo- estoy seca...

Y poco a poco veo como el tren se disipa en la lejanía... Sin destino definido.

©Orgav
Todos los derechos reservados sobre el texto.

Imagen extraída de Internet.

Momentos que se sienten

Escribiendo con los cinco sentidos: Sentido del oído.

Momentos que se sienten.

¡Resulta tan agradable  tomar café!   Pero café con café, de ese que se toma sin prisas,  sin programar.
Además del café, lo que me gusta es tomarlo contigo,  escuchando la voz de  tus palabras y nuestras risas.

Hoy, el sol nos ha acompañado. Ha venido con  un comportamiento tímido, pero se ha atrevido a acariciarnos con sus leves rayos.
Mientras, una suave brisa nos  ha alcanzado la melodía de una radio.
El cielo ha hecho su papel de fondo, regalándonos un ambiente de olor primaveral, con  pájaros  conversando.

La tarde decidió dejarse caer mientras caminábamos agarrados. Ha paseado junto a nosotros, con paso lento, como el susurro al arrastrar los zapatos.  Nos ha dejado disfrutar de cada instante en medio de un tú y yo con aromas  a  restos de café.

Hoy ha sido una tarde de esas que tanto me gustan. Una tarde llena de  historias y risas que me encantan escuchar y vivir, una de esas  en las que, pese a no poder ver,  puedo tocar y sentir la vida en todo su esplendor mientras guías mi camino. ¡Gracias!

©Orgav
Todos los derechos reservados sobre el texto.
Imagen cogida fñde Google.

sábado, 10 de febrero de 2018

Clariesencia

Escribiendo con los cinco sentidos: Olfato.

Clariesencia

_ ¿Imaginas lo maravilloso que sería que pudíeramos  regalar tiempo? Así, metido en su pequeña caja... con su lazada y todo...  ¿Y  que quien lo reciba pudiera  usarlo sólo en  aquello que le hiciese feliz? Yo lo invertiría  en  pasear por los campos de lavanda y dejarme envolver por su olor.  Seguro que si aprendiesemos a usar más el corazón, lo conseguíamos- me decía  mientras me apapachaba en su regazo.

Hoy te he vuelto a sentir y me ha  invadido  ese  olor a lavanda que siempre me recuerda que no estoy sola y  que debo ser feliz, por mí.

©Orgav
Derechos de autor sobre el texto.

Imagen sacada de Google.
Periódico ABC

jueves, 25 de enero de 2018

Sin cita previa

Nuevo relato con el que participo en el grupo de mujeres escritoras Nosotras escribimos.

Escribiendo con los cinco sentidos:
Tacto sedoso.

Titulo: Sin cita previa.

Fue en lo primero que me fijé. Su melena morena, brillante, captó mi atención. Me maravilló ver cómo se ondeaba a cada paso que daba y cómo bailaba en el aire cuando comenzó a correr.

La primera vez que lo acaricié y  sentí cómo se deslizaba entre mis dedos, me emocioné ¡era tan sedoso! Como buen peluquero, sé disfrutar de esas cosas.

Llevamos tres días juntos y lo estoy pasando muy bien, aunque el mejor día fue ayer.
Al principio no le hacía mucha gracia y huía de mí  pero después de muchas súplicas  guerreadas, dejó de quejarse, dejó de chillar y  de moverse.  Al final del día pude disfrutar al 100% de su cabello, me relajó tanto que incluso me quedé dormido jugueteando con él. Y a ella también  le  ha gustado, yo sé  que le ha  gustado.

Hoy se  lo he notado  apelmazado, apagado,  ya no resbala en  mis manos. Se me ha  ocurrido prepararle una sorpresa, voy a sacar mis mejores productos y se lo voy a lavar, seguro que le gusta. Estoy convencido que  un buen  lavado, enriquecido con algas, le puede devolver su "viveza..."

Derechos de autor sobre el texto.
©Orgav

Imagen usada pertenece a: Trucoscaserosparaelpelo.com

Opuesta polaridad

Nuevo relato con el que participo en el grupo de escritoras  Nosotras escribimos.

Escribiendo con los 5 sentidos: tacto electrizante.

Opuesta polaridad.

La primera vez que me ocurrió  me asusté muchísimo. Tendría unos 10 años o así.
A lo largo de mi vida  se ha repetido en numerosos momentos, con diferentes  personas y en distintos lugares,  y en todos y cada uno de ellos, la misma sensación desagradable, ¡la odio!
Creo que empieza a provocarme un poco de ansiedad el tema, y es que ¡nunca sabes cuando va a pasar!
En alguna ocasión se lo he comentado al médico pero me ha puesta esa cara de ¿ésta es tonta? y luego se ha reído  de mí diciendo  que es algo sin importancia y que exagero...
Ahora voy en el coche  camino del supermercado  y no puedo evitar pensar en ello. ¡Y mira que voy preparada! Llevo todo lo que me han recomendado: he clavado una buena hilera de grapas en las suelas de los zapatos que, por supuesto, no son de goma y me he puesto ropa de algodón. También  llevo una pulsera con una llave colgada para usarla llegado el momento.
Entro en el parking y me siento  confiada. Compruebo que todo lo que necesito esté bien. Me bajo del coche, saco una moneda, la meto en el orificio para desenganchar el carro de la compra y, sin pensarlo demasiado,  tiro de él con  firmeza.
Contenta, percibo que todo va bien. Subo en el ascensor y entro en el supermercado. 10 minutos de paseo y todo va genial.
De repente, a mi espalda, una señora mayor me pide ayuda. Siento como el calor de su mano está a punto de tocar mi brazo y me giro con brusquedad impidiendo el contacto. La pobre señora se sobresalta y, con timidez, me pide que por favor le recoja  el monedero del suelo; tiene "malas las piernas." En fin, suelto el carro y ayudo  a la buena mujer, que me da las gracias muy insistente. De pronto he recordado los huevos, ¡tengo que comprar huevos! Busco mi carro,  estiro una mano para empujarlo y  ¡iZasss!! ¡El jodido calambrazo de las narices! ¡Lo odiooo!

©Orgav

Todos los derechos reservados sobre el texto.

Imagen encontrada en Internet perteneciente a Dreamstime.com

miércoles, 29 de noviembre de 2017

Cerrando el año con reflexión.

Porque hay años y años, y porque cualquier momento es bueno o malo para que todo cambie...

Hace un  tiempo que me marché, me fui  por la puerta chica, sin hacer ruido, despacio, casi de puntillas...
Sí, me marché con sigilo, pero no por miedo, sino para demostrarme que realmente no tenía  demasiada importancia el cómo lo hiciese.

Con mi silenciosa despedida, me demostré  muchas cosas, todas ellas esenciales:

-  Me demostré que la distancia no acerca ni aleja a las personas. Que se puede estar muy cerca y a la vez muy lejos si  no eres nunca  la mejor opción.
- Me demostré que no todos pesamos lo mismo y, por lo tanto,  no tenemos el mismo valor e importancia para los demás.
- Me demostré que, a pesar de todos los esfuerzos, nada cambiaría porque no dependía sólo de mí.
- Me demostré que nadie iba a actuar como yo deseaba, a pesar de que mis intenciones fuesen buenas.
- Me demostré  que  los años que sumamos junto a otras personas sólo es tiempo, y por consiguiente,  el tiempo no es aval de ningún  tipo de relación.
- Me demostré que el único aval que cuenta, pese a todo lo que ocurra, es el sentimiento, que, si es de verdad, pase lo que pase, nunca va a morir.
- Me demostré que ninguna relación progresa si no se pone interés y que si   no existe reciprocidad,  esa relación no merece más dedicación ni  esfuerzos...

Con todo lo que me demostré, he  aprendido varias lecciones:

- He aprendido que no debo insistir ni buscar, que será mejor dejarme encontrar.
- He aprendido que te busca quien verdaderamente te tiene en su vida y que te encuentra quien quiere que formes parte de ella.
- He aprendido que las migajas  solo es el resto de algo que hubo y que ya no queda. Que las migajas de algo nunca será un  ingrediente suficiente en ninguna receta.
- He aprendido que no debo esforzarme por hacer funcionar lo que no funcionaba desde el principio.
- He aprendido que a quien no le gustas no va a cambiar de opinión por muy bien que le trates, por mucho que le quieras complacer.
- He aprendido que nada se debe hacer por  obligación ni por cumplir, solo hay que hacer aquello que  nace del corazón.
- También  he  aprendido que nadie debe cumplir conmigo, que nadie me debe nada y, claro está,  que yo tampoco.
- He aprendido que no tengo que perder el tiempo esperando que algo pase, si quiero que pase, hago que ocurra, porque esperar es vida pérdida. 
- He aprendido que puedo querer a quien me quiso bien aunque no esté presente en mi vida, porque el mañana es incierto.
- Igual he aprendido que quien te quiere bien, querrá verte siempre feliz  y que, hacerte daño, nunca será  una opción.
- He aprendido que la decepción  es una flor que florece rápido pero que no duele si la  razonas, si la comprendes.
- He aprendido que la felicidad te la ofrece la vida, no las personas, y que puedes hacerte de ella en cualquier momento, porque  no es una opción, sino una actitud...
- He aprendido que quererse uno mismo no tiene nada que ver con ser  egoísta, porque quien  sabe quererse a sí mismo, sabe querer a los demás.
- He aprendido que no hay que arrepentirse de nada, de ningún paso que hayas  dado en la vida, porque todo ello te ha llevado a estar y ser quien eres hoy, con sus cosas buenas y no tan buenas.
- Y sobretodo, he aprendido que no debo cambiar nada de mí y que voy a seguir dando lo mejor de mí  a quien se lo merezca.

He aprendido que la vida cambia de la noche a la mañana y que: "Nunca es tarde si se trata de aprender."

Verónica Orozco García.
Orgav.

lunes, 27 de noviembre de 2017

Amor verdadero solo hay uno

ESCRIBIENDO CON LOS CINCO SENTIDOS: SABOR DEL AMOR.

TITULO: Amor verdadero solo hay uno

El amor verdadero sabe a vida,
sabe a valentía y deseo,
sabe a nervios e incertidumbre.

El amor verdadero tiene hojas de calendario
y citas de agenda,
tiene rutinas que cumplir.

El amor  verdadero huele a humanidad,
huele a ternura y a miradas,
huele a los  besos más  sinceros.

El amor verdadero tiene la voz más bonita y  dulce que jamás vas a  escuchar.
Tiene musicalidad, ritmo,  alegría y miedos, todo junto...

El amor verdadero tiene olor
a grandes dosis de paciencia,
a muchas noches sin dormir,
a cansancio acumulado...

Al amor verdadero no le importa su ropa
ni su pelo, solo le importas tú.
Te lo da todo sin pedir nada y
rascar tiempo al reloj y a su vida
para seguir ahí, junto a ti.

El sabor del amor verdadero eres tú, mamá.

Mi Libro En Blanco Orgav

Limón, sal y tortas.

Aquí  les dejo otro relato con el que participo en el grupo "Nosotras, que escribimos."

ESCRIBIENDO CON LOS CINCO SENTIDOS: SABOR SALADO.

TITULO: LIMÓN, SAL Y TORTAS.

Laura me ha dicho que tome zumito de limón. Dice que su abuelo, que es camionero, lo usa todas las tardes antes de ir a cantar al karaoke y que tiene  una voz magnífica.
He pensado en ello y se lo he dicho a mamá  pero  dice que el limón  es muy fuerte y que se come el esmalte de los dientes. Así pues  no estoy muy convencida  al respecto.

Érika dice que debo tomar mucha sal, que me va a ayudar mucho. Dice que ella, cuando va al cine, come muchas pipas con aguasal y que, al rato,  nota un cosquilleo en la garganta y su voz es diferente.
Confieso que esta idea me llamó  la atención pero, al comentarlo con mamá, me ha dicho que es una locura, que los niños no debemos  tomar tanta sal,  que podemos  enfermar. Entonces me salió  otra vez con lo de la paciencia,  que aún tengo que crecer...

Mi hermano Roberto dice tener una solución, dice que, con un buen par  de tortas, conseguiría  mi propósito más  rápido y, claro,  que él  está  dispuesto a ayudarme cuando yo quiera...
¡Qué listo!  El cabeza hueca se cree que voy a caer en su trampa.

En fin, estoy que no sé muy bien que voy a hacer...  ¡Necesito  que mi voz empiece a ser diferente! Me encantaría poder escuchar a la niña que está en mí  y que se marche, de una vez por todas, este Marcos que odio con todas mis fuerzas y que me tiene atrapada...

Mi Libro En Blanco Orgav

jueves, 16 de noviembre de 2017

El amargo camino de la resiliencia.

Una nueva entrada con la que participó en el grupo Nosotras, que escribimos.

Ejercicio: escribiendo con los cinco sentidos, sabor: amargo.

Les  muestro un poema con sabor amargo. Trata sobre la importancia de practicar la resiliencia y el duro camino que hay que recorrer.

El amargo camino de la resiliencia.

Hoy voy a dejar que duela,
voy a dejar que la herida escueza,
que sangre...
Voy a meter los dedos en ella.
Voy a llorar por cada palabra
y por cada silencio,
por los intentos y  sueños frustrados,
por los años invertidos
y por el  fracaso...

Sí, hoy voy a dejar que duela
mientras lloro.
Y voy a dejar, con estas palabras, 
que el dolor se pronuncie
y que sean  las lágrimas
las que acaricien mi cara,
mientras los recuerdos
retuercen mi cuerpo
en un duro abrazo...

Hoy voy a llorar
y voy a dejar que duela.
Lo haré  por ti y por mí,
por el cariño
que aún nos procesamos
y por el respeto mutuo.
Pero sólo será  por hoy...

Y si mañana me ves sonreír,
si ves un matiz de felicidad,
te pido que no me juzgues,
que respetes el modo en que elegí
llevar mi sufrimiento,
que entiendas que no existe egoísmo
en querer sobrevivir,
y que todos tenemos que
ser resilientes
para dejar marchar los  demonios
que llevamos dentro.

Hoy dejo que duela mientras lloro...

©Orgav
Todos los derechos reservados.

sábado, 11 de noviembre de 2017

Microcuento 23: ¿Qué pesa más?

Tenía los bolsillos cargados.
En un guardaba las piedras que le incomodaron, en algún momento,
el paso. En el otro llevaba unas mariposas que nacieron, en su interior, de los momentos más felices.
Un día se dio cuenta de que, dejándose llevar, la vida se veía más  bonita desde las alturas.

©Orgav
Microcuento

Dejándome la piel

Escribiendo con los cinco sentido.
Sabor : UMAMI

Llevaba días con aquella  idea pegada en mis dedos. La tenía presente día  y noche; no  la podía  despegar.
Una mañana, en un estado de desesperación, casi  de locura, pensé  en  ayudarme  con la boca. Enganché   la idea entre mis dientes y tiré y tiré, cada vez con más fuerza.
El último tirón  fue tan fuerte que consiguí despegarla, también parte de la piel de los dedos. La idea salió lanzada hacia mi boca que, de la emoción,  la tenía   abierta,  y fue  a parar  a la garganta.
Al tragármela noté  un sabor diferente, intenso pero con un regusto delicioso; era lo que siempre había  escuchado como  el sabor umami de una idea.  Lo reconocí al instante.
Desde entonces, lo que nació como una idea pegajosa, llegó a mi corazón y se convirtió  en  obsesión; en mi  modo de vida.

Todos los derechos reservados (Texto)
©Orgav

Imagen utilizada de Google.

Traicionera atracción dulce

ESCRIBIENDO CON LOS CINCO SENTIDOS: SABOR DULCE

- El congreso es a las cinco. ¿Te importa si me doy una ducha un momento y después nos vamos a comer?
- Claro, no te preocupes, hay tiempo- digo despreocupado.
-Entretanto, si quieres tomar algo, el bar tiene dos o tres cosillas.
Veo irse a Marta al dormitorio. Mientras, decido ir a curiosear el bar. Al fondo, la escucho hablar de ir a "Casa Nonno Paolo", que tienen un tiramisù delicioso. Sus palabras  hacen  mi boca agua al recordar el amargor del cacao puro y el café; entiendo que mi cuerpo ya ha dado su aprobación.  
Cierro el bar y meto mis manos en los bolsillos; me veo sorprendido por el tacto suave  del interior. Curioseo los cuadros y las fotografías  del salón mientras escucho los pasos de Marta al otro lado del piso; el agua de la ducha empieza a correr.
En lo alto de una repisa, me llama la atención la fotografía de un hombre mayor vestido de capitán.  El  parecido con Marta es impresionante, deduzco  que es su padre. Me dispongo a cogerla cuando, de pronto, un olor dulce me atrapa.
-¿A qué  huele?- se me escapa en voz alta y, olvidándome por completo de la foto, siento la necesidad de ver de dónde procede.
Siguiendo el olor, llego al dormitorio de Marta. Está un poco desordenado; pequeños montones de ropa ocupan la cama. El olor me lleva a la entrada del baño y,  sin llegar a entrar, veo, en el espejo, el reflejo de Marta. Está preciosa con su pelo suelto y su piel  rosada. La observo. Pone jabón  en su mano derecha y se lo extiende sobre su hombro izquierdo de un modo que, se me antoja, muy sensual. El olor es muy agradable; me atrae. Huele a chocolate y a almendras tostadas, a pastel. Me recuerda a las meriendas, cuando era pequeño, en casa de mis abuelos. La abuela hacía bizcocho y preparaba el cocholate  para ponerlo por encima. Yo siempre rebañaba, con los dedos, el resto del cazo.
En medio de mi evasión, escucho:
- ¡Andrés!
Y, sorprendido, veo a Marta en la ducha con la cara desencajada, las manos separadas y una gota de aquel jabón colgando de unos de sus pechos.
Sin mediar palabra, me acerco a ella mirándola a los ojos y estiro  mi mano derecha hacia a ella. Es entonces cuando mi dedo índice  recoge, de forma golosa, la gota de jabón de su pecho y  lo meto en mi boca:
- Lo siento- le digo como si nada-tengo hambre. ¿Te queda mucho?

Todos los derechos reservados.
©Orgav

domingo, 29 de octubre de 2017

CORAZÓN SIN TARA.


La niña quería  la mariposa. Enamorada de sus colores y de su forma de volar, se le antojó tenerla de mascota.
Caprichosa, no desistió de sus intentos hasta que logró atraparla. La mantuvo  un rato entre las palmas de sus manos hasta que encontró  un buen sitio para verla sin que se zafase.
Atrapada, la mariposa decidió  salvarse haciéndose la muerta; se mantuvo  tumbada e inmóvil.
Al abrir las mamos y verla así,  la niña sintió un miedo atroz, su querida mascota podía  estar  muerta... Horrorizada, se lamentó,  ¡ya no vería  su bello y juguetón vuelo lleno de lindos colores...! Culpable, lloró deseando que se repusiera y prometió dejarla libre.
De pronto, la mariposa, tras ver el buen corazón  de la niña, quiso hacerla feliz. Se  zafó de sus manos y emprendió un débil vuelo que, poco a poco, fue recuperando toda su fuerza y belleza.
La niña, al ver la mariposa volar, soltó un suspiro de alivio y  se sintió afortunada. Aquel día  aprendió una importante lección: comprendió que no era necesario poseer la mariposa para disfrutar con ella y que, de ese modo, eran las dos libremente felices.

Texto redactado por Orgav.
Imagen tomada de Internet,  galería  pública de Google.
Todos los derechos reservados.
© Orgav

jueves, 6 de julio de 2017

Microcuento n° 22 Cuando cuentas para alguien, salen las cuentas


Porque una y mil veces
me sumabas
y una y mil veces
me restabas...
Al final me dejaste
en medio de un problema,
sin resolver...

© Orgav
Todos los derechos reservados.

Microcuento n°21 ¿Quién es el valiente?

Microcuento en 15

La mejor aventura es
la de aventurarse a vivir
la vida actual,
es adrenalina pura.

© Orgav
Todos los derechos reservados.

Microcuento n°20 Cualquier momento puede ser una aventura


Microcuento en 15

La aventura comenzó lenta
como la lluvía.
De pronto chocamos y
nuestras vidas pasaron volando.

© Orgav
Todos los derechos reservados.

miércoles, 5 de julio de 2017

Microcuento n°19 Cosas que se nos escapan entre los dedos

Un día  me di cuenta
que no necesitaba
todo lo que tenía.
Después vino el tiempo
y asaltó mi vida...
Desde entonces, comprendí
que todo aquello que tenía
era  lo único que necesitaba...

© Orgav
Todos los derechos reservados.

Microcuento n°18. Es doloroso dejar volar

El momento preguntó:
-¿Qué os ha pasado?

Y contestó:
-No he dejado de quererle,
he dejado de  insistir...

Nos ganó la falta de interés.

© Orgav
Todos los derechos reservados.

Entre tú y yo

Se secaron los días
quan hoja caduca.
Enmudecieron las risas
dejando, en su lugar, surcos.
Nuestros momentos
permanecen parados
en una agenda sin páginas libres.
Pero los recuerdos siguen...
Te sigo pensando,
a sabiendas qué el olvido acecha,
una vez más...

© Orgav
Todos los derechos reservados.

No me quiero rendir

Hay veces en la vida en la  que vemos como, poco a poco,se nos escapan las personas que queremos, que una vez quisimos (un amor, amigos...)
"No me quiero rendir" es un poema con el que, el personaje (cualquiera), intenta agarrarse a lo poco que queda de una historia, esperando que estas palabras sean la garra suficiente...


Título: NO ME QUIERO RENDIR.

No quiero olvidarme de ti. 

No quiero olvidar lo nuestro. 

No necesito que se acabe para saber lo que perdí. 


Necesito olvidar lo que tú  no eres, 

necesito olvidar lo que te hizo cambiar, 

lo que nos quitó  lo nuestro... 


Necesito recuperar la esencia.


Volver a empezar es imposible

pero continuar como empezó 

puede ser una solución.

Necesito que me necesites,

cómo yo te necesito,

para seguir luchando por ti.


Quiero formar parte de tus minutos,

quiero ser los días de tu calendario,

quiero ser quien cuente los años

llenos de risas y de momentos.


No puedo seguir esperando...


Siempre nos faltó  ese café  suplicado, 

ese abrazo pensado 

de la última vez que te vi.


Quiero Ser... 

Quiero que Seas...

Quiero que Seamos...


No me quiero rendir.



Todos los derechos reservados.
© Orgav


martes, 28 de marzo de 2017

Pájaros en la cabeza.

Una semana más,  un nuevo relato para el grupo Nosotras escribimos.
Un relato sencillo que te hará  reflexionar sobre la perspectiva de la vida desde dos prismas  diferentes: los adultos  o niños. ¿Quién tiene pájaros  en la cabeza?
Espero les guste.

Imagen n°10
Título: "Robin" de Truls Espedal.
Título  del relato: Pájaros en la cabeza.

¡Qué pesados son los mayores! Me  pregunto  qué   tendrán  en sus cabezas... 
Se pasan todo el día pendientes de las obligaciones, incluso me han mandado un montón de ellas  con la excusa de que tengo que llegar a ser una persona de provecho: que si debo hacer mi cama, que si una señorita que se precie debe cepillarse el pelo, que si debo mantener mi ropa limpia, que si mi habitación debe de estar ordenada, etc.
Creo que los mayores no comprenden lo complicado que es ser niño, ¿de verdad lo fueron? No sé yo...  El  único que me entiende es abuelo Robin, ¡seguro que él sí fue un niño! Pero el pobre es tan viejo que no creo que lo recuerde. Abuelo siempre le dice a mis padres: ¡Dejad a la chiquilla que se divierta, tiene edad de ello!
Y es que no comprenden, por ejemplo, que no puedo estar perdiendo el tiempo en cepillarme el pelo; para ganar la batalla  al enemigo necesito llevar mis trenzas, así  es como mejor se lucha. ¿Y cómo  creerán  que puedo mantener mi ropa limpia si tengo que estar enfrentándome a terribles dragones y rescatando a príncipes y caballeros en apuros?¡Eso es imposible!
Lo de la habitación  ordenada es el remate de los tomates. Que me expliquen cómo se  puede construir un fuerte que te proteja de los tiranos, los hechiceros y de los días de tempestad y tener la habitación  ordenada ¡No se puede, de verdad!  Con la de horas y cosas  que se necesita  para construir un fuerte perfecto que no se destruya con el más  mínimo  temblor de la batalla.
En fin, pienso que los mayores nunca serán  personas de provecho con esas ideas,  ¡si hasta hacen la cama todas las mañanas para deshacerlas otra vez por la noche!  La verdad... yo no los tendría  en mi batallón.
© Orgav
Todos los derechos reservados.

miércoles, 22 de marzo de 2017

Tiempo, el mejor de los legados

Una semana más, aquí  está  el siguiente relato con el que participó en el grupo Nosotras escribimos. 
Espero os guste.

Imagen n° 9
Título de la obra: "Habitación  de hotel".
Pintor: Edward Hopper.


Tiempo, el mejor de los legados.
Ellos se quedaron velando su cuerpo. Yo le dí  un ósculo y me despedí. Sabía  que,  allá  donde estuviese, ella lo entendería, nunca me gustaron esas cosas.
Llegué a la habitación  del hotel y me topé con sus maletas,  la residencia las había enviado.  Casi sin querer, empecé a abrilas; estaban llenas de ropa y viejas fotografías. Todo  olía  a ella, a notas de flores silvestres y a primareva... ¡Qué difícil se hacía!  Entre sus pertenencias, encontré una carta para mí y me embargó la melancolía. Me senté en la cama y comencé a leer:
" Querida Isabel, mi princesa...
Si lees esta carta es porque ya no estoy en vuestras vidas,  pero quiero que sepáis lo mucho que os he querido, que os quiero y que os querré. Siempre he deseado lo mejor para todos vosotros y que vuestras vidas estuviesen completas y felices. Por favor, díselo  así  a tus hermanos.
Quiero que sepas que, lo poco que tengo, lo he dejado repartido entre vosotros, a cada uno según  su necesidad. He decidido dejarle a tu hermana la casa, dado que nada le sale bien, estoy segura de que esto será  un aliciente en su vida. El poco dinero que hay en el banco se lo he dejado a tu hermano Javier para ayudarle a hacer realidad su sueño, su negocio.
Por cierto, en la última cena de navidad, tus hermanos, que te adoran, me han contado que todo te va muy bien, que has conseguido ese puesto tan importante que siempre quisiste y por el que has sacrificado muchos años de tu vida. Me han dicho que tienes una casa grandiosa ¡Un palacio! Seguro que es muy bonita, siempre tuviste muy buen gusto.  He visto, por la foto que me mandaste en navidad, que tu familia es preciosa  ¡Y que mis dos nietos estan muy guapos!  Una pena el no haberlos podido achuchar... nunca llegué  a ir a ese colegio interno donde están  estudiando.

Mi niña, he pensado que estas cosas  son minucias  para ti,  por ello he decidido dejarte  mi mejor legado, mi ley de vida:  
Debes disfrutar más de la vida y de tu tiempo  junto a la familia porque si la compartes con el amor y el cariño de los tuyos, la vida es maravillosa. Piensa que con muy poco también  se puede ser muy feliz, así  como yo  lo fui. Y recuerda que lo más valioso que puede tener una persona es tiempo para estar con sus seres queridos, porque la vida, cuando menos te lo esperas, se termina.

Te quiero mi niña, nunca lo olvides.
PD.: recuerda guardar un poco de tu tiempo para estar con tus hermanos, ellos te necesitan."
Aquellas  palabras de mi madre, siempre serán eco en mi conciencia... con su voz meliflua, digna de un ser  seráfico.

© Orgav  (Verónica Orozco García)
Texto registrado. 
Todos los derechos reservados.

miércoles, 15 de marzo de 2017

Remendando almas

Relato para el grupo Nosotras escribimos (nosotrasqueescribimos.blogspot.com)

Texto basado en la imagen n°8
Título: Mujer en el tocador.
Autor: Gustave Caillebotte.


Remendando almas

Tía   Marga era una mujer bonhomia, no hacía  preguntas y  siempre estaba ahí para ayudar. Una vez más, me abrió  las puertas de su casa; era  como entrar en otra época donde reinaba la sobriedad y el silencio.
Llegué  sin maletas, con el corazón desgarrado  y una ristra de lágrimas cosidas a  las mejillas.
-Quédate el tiempo que necesites -me dijo en un tono maternal frustrado.
Tía Marga tenía  experiencia en recomponer  almas. Toda su vida la dedicaba al oficio de dar cobijo espiritual. Decía que no hacía falta lujos, solo  tiempo, una habitación cálida,  una buena sopa y unos baños para meditar.
Mientras los días se descolgaban del calendario de la cocina, las lágrimas se fueron descosiendo. En el exterior, la vida moderna seguía  su ritmo. Allí  dentro, era como si el tiempo se hubiese parado hace ya unas décadas. Nuestras vidas se cruzaban por la casa en un impoluto silencio, no hacía falta  hablar, con la mirada nos entendíamos.
Tia Marga conocía las fases del duelo, sabía cómo actuar, de hecho, cuando llegó el final, ella lo supo antes que yo. 
Aquella mañana, para mí una cualquiera, abrí  los ojos y allí  estaba ella, sentada a un lado de la cama esperando mi despertar:

-Buenos días, hija; ¿cómo estás?
No sé  qué fue, si el ambiente de  aquel lugar, el cariño intrínseco  o la magia de aquellas palabras, pero de pronto sentí  que  la vida volvía  a mí, que mi corazón  volvía  a latir  y que ya no dolía. 
Me levanté, me puse aquella  ropa  con historia y, frente al tocador, me miré  al espejo y decidí  que mi vida continuaba, eso sí, con una nueva melodía...


© Orgav  (Verónica Orozco García)
Todos los derechos reservados.

miércoles, 8 de marzo de 2017

Por una amiga, lo que sea.


Imágenes: 
"La joven de la Perla" de Johannes Vermeer
"Reinterpretación de La joven de la Perla" por el fotógrafo Francisco Arteaga 
(modelo: Emma Fernández Manrique)
¡Voy a matar a Carla, la mato!
-Solo será  un rato- me dijo- no vas a tener ningún  problema; sigue las indicaciones y listo, cuando termines tendrás  un buen dinero en tu cartera...
Llevo quince minutos sentada en la misma posición y ya estoy agotada. He estado media hora en caracterización y vestuario para parecerme a "La joven de la Perla" del pintor Johannes Vermeer. La ropa no es muy pesada pero da mucho calor; lo peor es la postura, estoy sentada de lado pero con la cabeza girada mirando al frente, me va a dar una tortícolis en el cuello y aun faltan veinticinco minutos de exposición  ante toda la clase de bellas artes. Esto es un suplicio, de verdad, estoy rezando para que pase el tiempo más rápido, noto varias sensaciones a la vez en mi cuerpo: calambres, dolores musculares, incluso algún  pequeño tic en uno de los ojos solo de pensar que no llevo ni la mitad del tiempo.
Carla está  acostumbrada pero yo... Me pregunto qué  pensará  mientras está en plena sesión. No he caído en preguntarle, me hubiera venido bien algún  consejo al respecto  porque lo que es mi cabeza, no para, y lo peor es que me muevo sin darme cuenta.
¡Ay, madre mía! ¡Y ahora tengo ganas de hacer pis! ¡Ay Dios! ¡Cómo  me he dejado liar...! Ojalá  pasen pronto los minutos que quedan...
De verdad, cuando vea a Carla se va a enterar... aunque estoy segura de que se va a morir de risa.
- Señorita, por favor, deje de moverse de una vez.
  © Orgav
Todos los derechos reservados.

  


sábado, 4 de marzo de 2017

Ilustraciones en 3D

Buenas amigos seguidores, hoy les dejo unas práctica  de ilustraciones en 3D, desde figuras geométricas,  hasta letras y otras cosillas.
Espero que les guste.
También  me pueden seguir en Instagram: Portafolio_ Orgav.

Imágenes registradas con derechos de autor.

Ilustraciones Orgav

jueves, 2 de marzo de 2017

La sesión

Un día  más, aquí  les dejo otro relato para el grupo Nosotras escribimos.
Espero que les guste.


EJERCICIO IMAGEN 6
IMAGEN: "MORNING IN VENICE" 
Autor: Richard. S. Johnson


La sesión.

Es un sueño muy recurrente, rara es la noche que no lo tenga. No comprendo muy bien que  puede significar pero tengo la impresión  de que no es malo. Me hace sentir bien.

Sueño que estoy en Venecia, ¡y que hablo italiano! Es muy extraño porque no tengo la sensación de estar en un sitio desconocido, al contrario, todo me parece muy familiar. El sueño casi  siempre es igual: primero percibo un olor agradable, fresco... huele cómo a flores. Me hace sentir bien, en paz, como si estuviese en casa. Veo a una mujer, siempre es la misma: tiene el pelo rubio, recogido; va vestida con ropa ligera, suave al tacto y descalza. Está sentada en la terraza, viendo pasar las góndolas. Está relajada, la siento relajada... De pronto reconoce a alguien, se pone nerviosa, sonrie y dice: ¡Ciao, Mateo! ¡Si dispone di una bella giornata! Empiezo a sentir su felicidad, se levanta de la silla y se pone a bailar por la terraza, puedo sentir el roce de las losas en los pies.
-Entiendo... entonces,  ¿crees que eres  la mujer del sueño?
-No tengo ni idea, lo único  que  sé  es que percibo todo lo que ella siente y que me hace sentir muy bien.
-Comprendo. Creo que deberíamos probar con la técnica  de la regresión, quizá  podamos descubrir algo más  sobre este sueño. Mire, Pablo,  no le puedo garantizar respuestas muy claras, pero la regresión  nos permitirá  llegar a diferentes etapas anteriores de su vida , quizá  se trate de alguien que conoció  en su infancia, alguien  a quien usted admiraba. ¿Sabe si, cuando era pequeño, pudo viajar a Italia alguna vez?
-Lo dudo... Mis padres se separaron cuando yo tenía  5 años y mi madre me mandó  a un colegio interno, no salí  de él hasta que cumplí  la mayoría  de edad...
-¡Ummm! Pues  descartando esa posibilidad, tendremos  que centrarnos en una regresión  más  intensa. Es posible que salgamos del plano en el que estamos y lleguemos  a otras épocas, épocas  en las que  no podrá  creer que ha vivido, me refiero a vidas anteriores...  Pero existe un problema, corremos el riesgo de descubrir alguna cosa que no le guste y que no quiera recordar... 

© Orgav
Todos los derechos reservados

miércoles, 22 de febrero de 2017

Resiliencia

Esta semana les traigo dos nuevos relatos con los que participó en el blog de Nosotras, que escribimos.
Aquí  les dejo el primero,  espero que lo disfruten.
Saludos.

Relato 1 de 2.
IMÁGENES 4 (OTRA MARGARITA) Y 5 (PASEO A LA ORILLA DEL MAR) 
PINTOR: JOAQUÍN SOROLLA
RELATO: RESILIENCIA 
AUTORA: ORGAV


Él la  abofeteó por última vez. Ella se golpeó contra la pared y la inercia hizo que, por un momento, su cuerpo le cayese encima, para después acabar en el suelo. Solo bastó aquel instante para que el peso lo hiciera retroceder. Él era un hombre corpulento que media dos metros. Estaba borracho y su embriaguez no le dejó  percatarse  de la barandilla que estaba tras de sí; su cuerpo se precipitó sobre el hierro y cayó en las escaleras. Murió en el acto.
La policía no quiso creer esta versión.  Ella fue enjuiciada como asesina pese a ser inocente; el único delito que había cometido era  el haber  aguantado cada una de sus palizas…
En el periódico salió retratada; La viuda negra,  se leía en letras grandes. Se podía ver a una mujer vestida de negro, cabizbaja, sin fuerzas, aceptando  la última  penitencia que el destino le imponía...
Tras cumplir su condena, se mudó  a la costa; desde entonces vive en un faro. Cuando llegó a aquel lugar, se prometió ser una mujer diferente, ser feliz. Dejó que el mar y la brisa se llevasen cualquier resto de lo que un día  fue. El único recuerdo que ha querido conservar de todo aquello,  duerme escondido en el fondo de un baúl: aquel viejo recorte de periódico que le dieron cuando salió de la cárcel. 
Todas las mañanas,  se pone uno de sus mejores vestidos, su pamela y sale a pasear por la playa como una dama más;  disfrutando así de su merecida libertad...


© Orgav  (Verónica Orozco García)
Relato registrado.
Todos los derechos reservados.


En manos del destino

Esta semana les traigo dos nuevos relatos con los que participó en el blog de Nosotras, que escribimos.

Aquí  les dejo el segundo,  espero que lo disfruten.

Saludos.

Relato 2 de 2.

IMÁGENES 4 (OTRA MARGARITA) Y 5 (PASEO A LA ORILLA DEL MAR)
PINTOR: JOAQUÍN SOROLLA
RELATO: En manos del destino.
AUTORA: ORGAV

¡No voy a llorar más! Repito en mi cabeza una y otra vez mientras  salgo, sigilosa,  de aquella inmunda casa.  Los días de encierro  y desesperación han terminado.
Ahora, en una modesta habitación de hotel, tengo conmigo todo lo que necesito: unas viejas prendas, dos cuadros y mi libertad. Estos cuadros son muy importantes para mí, sus imagenes son muy simbólicas, me ayudan  a seguir;  una de ellas me recuerda  el infierno en el que he estado atrapada  estos últimos cinco años,  la otra me permite  tener presente  por lo que debo luchar…
He escapado de las garras de un ser zafio, un ser con un corazón enjuto... Yo no era otra cosa en su vida  más que una adquisición  valiosa  de la que badajear  con sus amigos; después me tenía encerrada en aquella habitación.  El cuadro de la mujer vestida de negro es  una metáfora de mi vida a su lado; siempre sometida... castigada... pendiente de condena…
Quiero volver a encontrarme conmigo misma, coger las riendas de mi vida, ser libre… feliz.  El cuadro de las mujeres vestidas de blanco me recuerda quien soy y  quien fui antes de que él apareciese en mi vida. Me trasmite la fuerza que necesito para volver a empezar. 
No tengo miedo a lo que esté por venir porque sé que él recibirá su castigo.  Tarde o temprano  encontrará, en la bodega, la botella de whysky que dejé preparada…

© Orgav  (Verónica Orozco García)
Relato registrado.
Todos los derechos reservados.


jueves, 16 de febrero de 2017

El infante

Aquí  les dejo el tercer relato escribo para el grupo Nosotras escribimos cuyo blog es Nosotras, que escribimos.
Espero que les guste.
Un saludo.

Imagen 3. "Escena de Noche" de Pedro Pablo Rubens.

Título: El infante.

Aquella tarde, papá se enfadó  conmigo. Regresé  a casa con los pantalones rasgados y llenos de barro. Le dije que había  sido un soldado  de tierra que salvó  su vida y la del pelotón  gracias a las trincheras, pero él  no lo comprendió. Inquirió  el porqué de mi comportamiento y no supe que más  decir. Me recriminó a voces mi aspecto  y el de mi ropa y se marchó, no sin antes darme un bofetón...

Papá  no me entendía. Siempre me miraba con ojos extraños  y con aquella expresión de rabia, era como si me culpase de algo... Desde que mamá  se marchó, creo que dejó  de quererme...

Con abuela todo era  diferente. Mi vida era diferente... Entré  en el salón  y allí estaba ella, sentada en la mecedora junto a la ténue luz de una vela. Entre sollozos, me acerqué  a ella y la besé.

Sus dedos pulgar, índice y corazón envolvieron mi  barbilla y, con aquella dulzura que le caracterizaba, levantó mi cara. En medio de un amago de seriedad, me miró a los ojos y me dijo: "querido, cada día  estás  más  hermoso y más cerca de ser todo un caballero".  De seguida, aquella fingida seriedad se rompía   con nuestras risas, mientras me apapachaba en su regazo...

Abuela me recordaba a la primavera. Ella siempre olía  a flores, a jazmín  y azahar...  a suave lluvia mañanera... La piel de sus manos era fina, de tacto como la seda y emanaban  un  calor reconfortante. Cada vez que me acurrucaba entre sus brazos, me hacía sentír seguro, querido... en paz con el mundo. Me hacía olvidar cualquier mal que me hubiera podido pasar...

Tras los besos y los arrumacos, me dijo que fuese a por unas velas y que me  sentase a su lado y sin dudarlo, cumplí mi cometido. Entonces, se llevó  la mano al bolsillo de su delantal y me dijo: "vamos a ver que tenemos hoy por aquí..." De seguido, sacó  la mano bien cerrada, como si no quisiese que se le escapase algo. ¿Estás  preparado?- me preguntó- y yo, emocionado, le contesté que  sí.  Cuando abuela abrió su  mano, comenzó  la magia...

Abuela no tenía nada en sus manos pero, a su vez, lo tenía todo para mí... Cada tarde, a la caída del sol, con el pretexto de hacerme olvidar las penas  endosadas o con la simple intencion de pasar un rato juntos, buscaba en su bolsillo una aventura que contarme, una nueva historia que vivir...

© Orgav  (Verónica Orozco García)

Todos los derechos reservados.

domingo, 12 de febrero de 2017

Microcuento 17°. La lluvia

Día  de ventanas grises,
de sonidos arítmicos que mojan.
Cálido regazo del que cobija,
colorida estancia, su compañía.

Microcuento "La lluvia" (Sinestesia)
© Orgav  (Verónica Orozco García)
Todos los derechos reservados.

jueves, 9 de febrero de 2017

Microcuento 16°. Saber elegir tus victorias

Sapo no quiso ser príncipe. Prefirió  conquistar a la princesa, besarla y convertirla en rana.
Fueron felices

Microcuento Orgav

Microcuento 15°. Huellas de amor

Abrió su mano y, entre risas, dejó escapar el más bello de los besos nacido de sus labios.
Aún lo siento.
Microcuento Orgav

miércoles, 8 de febrero de 2017

Microcuento 14°. El Yo

Ver su reflejo en el espejo le enseñó a reírse de sí  mismo, luego, del resto del  mundo.

Microcuento Orgav

martes, 7 de febrero de 2017

Microcuento 13°. Felicidad, divino tesoro

No era ni como el rico que más tenía,  ni como el  pobre que sólo se lamentaba, él era feliz.

Microcuento Orgav

El poeta pobre más rico del mundo

Se codeó  con la alta y baja sociedad y cada uno de ellos tiraban de él  para llevárselo a su terreno. Terminó  tan aturdido que no comprendía dónde debía de estar.
El destino le enseñó que debía  alejarse de lo que no era y de lo que no quería  ser, y que de ese modo se descubriría así  mismo.
Desde aquel momento comprendió que no es más rico el que más tiene sino el que menos necesita y que no es más pobre que él que solo se lamenta. Comprendió que él era muy  afortunado por tener sólo lo poco que le hacía  muy feliz...

Relato corto: El poeta pobre más rico del mundo.
Autora: © Orgav  (Verónica Orozco García)
Todos los derechos reservados.

lunes, 6 de febrero de 2017

Los 5 destinos de la vida

Aquella mañana se despertó  sin ganas de mucho... Había tenido, una vez más, aquel sueño y  aquella sensación que le auguraba cambios.  Comprendió  que había  llegado el momento, que era hora de dejar  aquel lugar.
Se despidió de todo lo que allí quedaba. Sabía que ese iba a ser uno de esos viajes que no necesitaban equipaje.  
Fuera, el sol hacia brillar su rosada y desnuda piel. Y una suave y cálida brisa arremolinaba, lentamente, las hojas de aquel  árbol que, por un tiempo, le había  dado cobijo. Las hojas, ahora juguetonas, empezaron a aferrándose a su cuerpo formando un manto y ella,  ligera cómo  una pluma, levitó  entre los árboles de aquel lugar y se  dejó llevar, una vez más,  por la fuerza del destino...

Relato corto. Los 5 destinos de la vida.
© Orgav  (Verónica Orozco García)
Todos los derechos reservados.