No te conozco,
pero te temo.
Te he visto pasar
por vida de otros,
quizá, conocido, familiar o amigo.
Pasaste de puntillas,
a hurtadillas,
con sigilo de zorro,
para, de pronto,
hacer un atroz ruido
y llenar sus vidas
de sufrimientos y lágrimas,
de desesperanza.
Te temo, para que mentirte.
Temo que un día aparezcas
irrumpiéndolo todo,
lo bueno...
lo malo...
Temo que aparezcas
en mi vida para quedarte
y llevarme...
O en mis otras vidas,
para robar los corazones que amo.
Temo que nos agarres de las manos
y que pese a nuestras fuerzas,
tu bravío, nos arrebate la vida.
Temo que se agote la entereza,
que nos hace fuertes,
para saber llevarte,
y que pese todo esfuerzo,
tú, con gloria,
puedas coronarte
con una victoria de cobardes.
Te temo, sí, te temo.
Pero temerte
me permite tenerte presente
aún cuando estás ausente.
Temerte nos permite
aunar fuerzas para afrontarte.
Nos da la oportunidad
de conocer y luchar,
de ayudar y prevenir,
de concienciar y levantar...
para que, con esperanza,
NI UNA VEZ MÁS,
PUEDAS GANAR LA BATALLA,
con una victoria de cobardes.
PORQUE AUNQUE TE TEMA, LUCHARÉ.
LUCHAREMOS AL GRITO DE
"TODOS CONTRA EL CÁNCER"
Todos los derechos reservados.
Orgav
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