Las hazañas del gran Pluma Roja

Un cuento cuentito, te voy a contar, se trata de éste indio que te vino a saludar:

- ¡Jau, jau!  Pluma Roja me llamo  y vivo con mi tribu en un gran poblado que entre todos hemos creado.

Escucha este  cuentito que te estoy contando, pues nuestro amigo el indio mucho te está enseñando:

- Esta mañana, bien tempranito, me fui  a  cazar, cogí mi lanza y mi arco  y unos bisontes fui a buscar.

Despacio despacito, el indio se movía, pues allá a lo lejos, unos bisontes veía.

- Si tú un bisonte quieres cazar, como una serpiente te has de arrastrar. Intenta ir despacio y que el bisonte no te vea  porque si eso ocurre, saldrá a la carrera.

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Y así fue como el indio se movió, que con dos bisontes bien grandotes a la tipi regresó.

- Hoy he tenido suerte y con dos bisontes he regresado, cuando estaban bien muertos los até con una cuerda y los amarré a mi caballo.

En el poblado una fiesta quisieron organizar en honor de Pluma roja y su gran hazaña.

- No olvidéis niños,  lo importante que es para nosotros los bisontes, pues con su carne tendremos alimento  y con sus pieles ropaje.

Hoy a Pluma Roja con honor le han condecorado y unas cuantas plumas le han regalado.

- Aquel que  más plumas de águila tiene en su  cabeza,   más poder tiene en el poblado. Yo soy el gran jefe indio y con mi fuerza lo he demostrado.

Para que no se olvide tal hazaña, a Pluma Roja lo han pintado. Las ancianas, con sus recetas, unas pinturas han creado:

- Si pintura queréis hacer, unos secretos de indios os contaré… 

“Si con negro queréis pintar, el carbón debéis usar.  Para pintar con  verde  unas cuantas  unas plantas tendréis que machacar.  Para usar un  rojo bonito, machacar unas bayas en un cuenco. Y si el  marrón te gusta más,  es muy fácil de fabricar, con un poco de agua y mucha tierra harás un buen barro, úsalo para pintar.

Y tras vestirse con pieles y plumas, comen la carne cazada  y dan las gracias a los dioses:

- Hoy ha sido un día de suerte, los dioses están de nuestra parte. Debemos ser agradecidos y devolver a los dioses lo que nos han ofrecido.  Para honrar nuestra suerte bailaremos la danza de Parwin.

Hoy todos en el poblado están muy contentos, bailan y saltan a coro, unos avanzan y otros van retrocediendo, mientras, otros  marcan el paso con un bastón de madera y otros chillan unas palabras en su lengua.

Bueno amigo, este cuento cuentito se ha terminado, espero  hayas aprendido mucho y que te haya gustado y no olvides lo que Pluma Roja te ha enseñado…

“Si las cosas las haces con esfuerzo, siempre serás recompensado”

Autora Orgav (Verónica Orozco)

Ilustración realizada por Orgav

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